Salud Pública
El art 43 de la Constitución habla del derecho de los ciudadanos a la Salud Pública y la protección de la salud. Se configura no como un derecho fundamental sino como un principio rector de la actividad social y económica pero que relacionado con el derecho a la vida, impondría una serie de obligaciones a los ciudadanos.
En este sentido, no es el único caso en el que el ejecutivo convierte un derecho en una obligación. Ya no se trata de que el Estado proteja sino que el ciudadano se debe obligar a sí mismo a protegerse, a proteger a los demás y a someterse al criterio político... para salvar vidas. Pasamos de "voy a protegerte porque es mi obligación" a "debes protegerte y debes proteger a los demás o si no te multo"... para salvar vidas.
Una vez más la carga recae en el ciudadano.
El derecho a la salud, se convierte en una obligación del ciudadano que no solo debe obedecer las instrucciones sino que debe someterse el control de los médicos del estado. especialmente si se trata de ancianos, enfermos mentales, discapaces, mujeres y niños... para cuidar de los más débiles.
Y no es banal la posición porque se trata de salvar vidas.
Al fin y al cabo
¿qué puede hacer un gobierno con una población tan libre como irresponsable?
Tan solo le queda dar órdenes y esperar que se cumplan por las buenas o por las malas.
Se trata de salvar vidas y ahorrar costes como sea.
Supongamos
Imaginemos una enfermedad silenciosamente asintomática en su comienzo, que afecta simultaneamente a 340.000 personas y causa 210.000 muertes al año ¿Terrible no? ¿Habrá que evitarlo?
En la mayor parte de los casos se trata de una enfermedad de origen desconocido. Puede que sean virus, hongos, radiaciones,... pero no se sabe con certeza el origen de la enfermedad.
Pensemos que esta enfermedad afecta y mata a los más débiles como los ancianos, las mujeres y los niños y cada año se lleva a gran parte de ellos, y lo más importante: No hay tratamiento conocido con eficacia y seguridad demostrada. Se busca una vacuna segura y eficaz, fármacos menos tóxicos y peligrosos, terapias avanzadas, anticuerpos monoclonales... Todo en vano. A pesar del coste económico de esta enfermedad, y la inversión en investigación, no hemos dado con la cura.
Algo deberíamos hacer contra una enfermedad que cuesta a los españoles no solo 210.000 víctimas al año sino 20.000 MILLONES de euros. Cada año, cada paciente cuesta de media 60.000 euros. Un presupuesto que no nos podemos permitir. Muchas muertes a un coste muy elevado. Algo deberíamos hacer.
¿De qué enfermedad se trata?
Se llama Cáncer. La enfermedad se llama Cáncer.
¿Qué deberíamos hacer como ciudadanos contra esta enfermedad que tanto dinero y vidas cuesta?
¿Análisis y cribados genéticos masivos?
¿Biopsias por rutina?
¿Inventar e imponer una vacuna experimental contra el cáncer?
¿Quimioterapia preventiva?
¿Multas y detenciones a quienes no se hagan las pruebas o se sometan a los tratamientos preventivos?
¿Eutanasia a quienes rechacen los tratamientos "oficiales"?
¿IR POR LA CALLE con un gorro hecho de papel de aluminio?
Por lo que hemos visto con el Covid y otras situaciones, parece ser que sí.
La culpa es del ciudadano, la responsabilidad es del ciudadano, las órdenes las debe cumplir el ciudadano y el coste económico lo debe asumir el ciudadano.
No extrañamos con el covid pero el esquema del covid es el mismo que el del cáncer y el de las enfermedades mentales: Hay que proteger a la sociedad y la culpa es del ciudadano y debe pagar por ello.
Hay mucha gente que no cree posible que la locura del Gobierno, la necedad de los funcionarios médicos y la avaricia de farmacéuticas y políticos nos pudiese llevar a una situación de brutalidad tal en el caso del Covid.
Creen que todo tiene un límite y los propios funcionarios se darán cuenta y frenarán.
O peor aún, creen que un juez les daría la razón...
Pero llevan décadas haciéndolo.
Y nadie frena.
Con la enfermedad mental en España pasa otro tanto.
Unos 800 muertos anuales atribuidos a las enfermedades mentales.
65.000 internamientos y tratamientos involuntarios cada año.
30.000 incapacitaciones cada año.
Diagnóstico involuntario
Experimentación forzada.
Esterilizaciones forzadas, abortos forzados.
Un coste anual de 34.000 millones de euros CADA AÑO
CADA AÑO desde hace décadas y nadie lo ha frenado.
Sopa Tóxica
Vivimos en una sopa tóxica.
A "pesar" del Gobierno y sus Agencias reguladoras y protectoras...
El agua está cada vez más contaminada por una mala gestión y por la corrupción política.
Los campos está repletos de productos químicos orientados no a la salud sino a las cifras macroeconómicas que interesa a la corrupción del Gobierno.
Los fertilizantes son cada vez más tóxicos y extensivos en beneficio de la productividad extractiva.
Nuevas semillas aparecen bajo el progreso científico y suponen un riesgo para la humanidad.
La industria química llena los alimentos naturales y procesados de miles de sustancias tóxicas, cancerígenas y disrruptivas. Plantas y animales llenos de productos nocivos.
Igualmente llena nuestros hogares de detergentes, ambientadores, lacas y envases igual de tóxicos, cancerígenos y disruptivos.
Los medios de transporte siguen siendo una fuente de contaminación, con carburantes terrestres y aéreos que inundan la atmósfera.
Las telecomunicaciones se extienden de manera irracional por el planeta sin sentido, sin racionalidad y sin proporcionalidad, inundando el espacio de una contaminación electromagnética de la que no nos podemos proteger.
El Gobierno construye un mundo en el que no puedes huir de su control ni puedes protegerte a tu manera. Si cuidas a tu familia de todos los peligros, vendrán los servicios sociales. Si cultivas ecológico, tendrás tanta burocracia que te costará respirar, si buscas salud alternativa te criminalizarán y amenazarán, si te proteges de radiaciones artificiales te catalogarán de loco y si te pasas un pueblo te tacharán de enfermo mental y te medicarán a la fuerza.
El Gobierno se rodea de decenas de agencias de salud, medicamentos y medioambiente que simplemente mantienen la situación en caída libre, mientras nos dicen que estamos seguros y que toda la contaminación, nada tiene que ver con nuestra salud.
Pero se trata de salud pública
Nos preocupamos por usted
No piense
El covid, el cáncer y la esquizofrenia están al acecho
No se preocupe
Nosotros pilotamos la nave
Calle
Obedezca
Es mi obligación como uno más, desde mi discapacidad y como enfermo mental, es solo una circunstancia, yo soy persona ante todo, y denunciar el trato que estoy recibiendo de la sanidad pública y los servicios sociales, soy objetivo facil, sin capacidad de defenderme....pero puedo denunciar .. la prepotencia y el poder de ejecutar a una persona, con el poder de la profesión....medico sanitaria....sin más prueba, ni derecho ...ni derechos humanos ....por los que tanto luchamos...sirvo de ejemplo para quien quiera ...ver y seguir
Muy bien explicado, sí señor!! Totalmente de acuerdo, Luis. Y principalmente lo referente a las enfermedades mentales. Las familias tenemos que estar siempre al tanto, porque si por la sanidad pública fuera, abusarían. Tantos años defendiendo las patologías mentales y tratando de quitar el estigma de la enfermedad mental y al final, es la propia sanidad y organismos públicos los que discriminan a estos pacientes. Pero claro, como tienen una enfermedad mental ....... Qué pasa, es que por eso no tienen derechos? Inaceptable !!
Gracias por tu coherencia y por explicarlo tan bien.
Eso que acabo de decir no quita la verdad de lo que dice Luis en su reflexión
Hay un dato que Luis ha olvidado. La diferencia de estas enfermedades con la Covid-19 es que ésta es (oficialmente) contagiosa. Si el cáncer, por ej., fuera una enfermedad contagiosa, seguramente se abordaría oficialmente de otro modo.
Perfectamente explicado. Parece ser más fácil, en muchísima gente, vivir como la avestruz...aquí no pasa nada y sigamos con pan y circo, por cierto, que el pan también es menos pan. Muchísimas gracias por vuestro vuestro trabajo. Un saludo 🙏🙏🙏